domingo, 19 de mayo de 2024

RESEÑA DEL LIBRO "LA MURALLA DE DIOS"

 

“LA MURALLA DE DIOS”

 

    En la contraportada de este libro se lee lo siguiente:

 La muralla de Dios demuestra un profundo entendimiento de las complejidades sociales en una narrativa distópica que desafía las normas y reflexiona sobre la opresión, la resistencia y la búsqueda de la verdad, en un mundo ficticio, pero impactantemente realista.”

     Debo decir que estoy de acuerdo en que la historia refleja un mundo distópico, o lo estuve al principio, ahora no estoy tan segura de esa opinión. A pesar de que el mismo autor afirma que “es un mundo ficticio”, hasta podría decir que esa frase puede llevar en sí misma una nota de sarcasmo.

     Imaginemos un país con un avance tecnológico considerable y una sociedad avanzada (¡Oh, claro! No me había dado cuenta de que esta podría perfectamente ser la parte ficticia de la historia), todo esto enmarcado en un proceso electoral democrático, resaltando el hecho de que este país no cuenta con ejército. Podría ser cualquier país de Latinoamérica, claramente.

     Este proceso electoral cuenta con la particularidad de que es la cuarta vez que un candidato de tendencias religiosas algo extremistas se presenta a las elecciones presidenciales. En las tres ocasiones anteriores estuvo a punto de ganar las elecciones y espera que esta cuarta vez sea la vencida, sin embargo no sucede y eso desata su furia.

     Cabe destacar que aunque esta sociedad tiene tecnología y oportunidades, sigue presentando brecha social. Existe un sector de la población que no percibe esas oportunidades de la misma manera que los demás, un sector vulnerable, tanto en educación como en economía. Tristemente, son estas personas vulnerables el blanco más fácil que se ve atraído por las promesas de un mundo mejor de este partido religioso, porque Dios les va a dar el estado prometido. A esta parte de la población se suman las personas con carencias emocionales y todo tipo de problemas personales que buscan validación, esperanza y apoyo, cosas que creen encontrar en una Iglesia y por ende, en este partido político cristianizado. Y podríamos decir que buscar apoyo espiritual no está mal, de alguna manera todos a nuestro modo lo buscamos, sin embargo, cuando este fervor religioso se utiliza para controlar a las masas para el beneficio de una élite, se pierde ese objetivo altruista y se convierte simplemente en una estrategia más para concentrar el poder en unos pocos, una estrategia bastante convincente y de antiquísimo uso.

 

Porque, pensemos además, que estos poderes religiosos podrían verse envueltos en corrupción, deshonestidad e hipocresía como es común ver dentro de la política. Por supuesto que no podemos generalizar, existen funcionarios honrados, pero también existen otros que solamente buscan un beneficio propio sin importar si los medios utilizados rayan en lo ilegal. Y es en este punto donde comenzamos a ver esos tintes de hipocresía en los personajes de la política que nos presenta esta novela. Un candidato/pastor dentro de toda una estructura de un partido político basado en religión, que dirige una Iglesia y a su vez, utiliza una interpretación muy conveniente de las escrituras para manipular a sus adeptos y consigue así, un enorme rebaño que de manera incomprensible lo apoya.

     Por supuesto, al tener normas basadas en preceptos religiosos, los feligreses de esta comunidad deben cumplirlos a la perfección. Dentro de estos preceptos podemos nombrar algunos como la completa sumisión de la mujer y detrimento de sus derechos, la negación de los derechos de la comunidad LGBTIQ+, el retroceso en materia de educación sexual y podríamos seguir enumerando. Pero claro que los líderes políticos y religiosos de esta comunidad cumplen con todas estas reglas para dar el ejemplo, mientras son observados. Cuando pueden esconderse, estas reglas se vuelven mucho más laxas para la élite, comprendiendo amantes que incluso pueden provenir de la trata de personas, secuestros y abusos sexuales, relaciones homosexuales y una considerable cantidad de asuntos turbios, pero “ojos que no ven, corazón que no siente”. Para los feligreses, sus líderes son hombres santos.

    Ahora, volvamos al hecho de que este es un país democrático y pacífico, libre de ejército. Cualquiera diría que un golpe de estado sería algo impensable en este contexto, que el resultado de un proceso electoral se respetaría porque es la decisión del pueblo. Cualquiera diría…

     Pero un catastrófico día este candidato/pastor al verse derrotado de nuevo, decide unir fuerzas con organizaciones políticas de otros países, con ideales similares a los suyos y que le pueden proporcionar apoyo militar. Es aquí cuando sucede lo inimaginable, el mundo distópico del que hablamos al principio, porque claramente el extremismo político-religioso no se da y nunca llegaría a un país como este. ¿A quién se le ocurriría confiar en políticos con ideales dudosos como estos? Y entonces, producto de esta alianza se da ese golpe de estado, se levanta un muro que divide este país en dos partes: el país original y el nuevo país que constituye la tierra prometida para los feligreses de este partido.

     Así es como de pronto tenemos el país original con sus avances tecnológicos, la lucha social, la búsqueda por mejorar la equidad social y la preservación del medio ambiente. Y al otro lado de un muro que se construyó haciendo uso de esa misma tecnología, un nuevo país donde ya la tecnología es casi inexistente, las leyes se basan en la interpretación de la Biblia, los terrenos se confiscaron a sus dueños originales para instalar feligreses, las personas que no pudieron huir a tiempo y no están de acuerdo con el nuevo régimen son encarceladas en el mejor de los casos. Las mujeres no tienen derecho alguno y no digamos ya los miembros de la comunidad sexualmente diversa, porque formar parte de esta, es ahora un delito grave con un castigo que podría recordarnos fácilmente los tiempos de la inquisición. No existe comunicación con el exterior y una vez dentro de este país es prácticamente imposible salir, sobre todo si se es mujer.

     Obviamente, todo esto es en absoluto producto de la imaginación del autor. No podríamos decir que haya obtenido inspiración con hechos reales. No es como que en la actualidad inclusive existan gobiernos religiosos extremistas, o que alguna vez una nación haya sido dividida por causa de un muro. O que se vean coartados los derechos de las personas por su género, credo, etnia o identidad y preferencias sexuales. Sin mencionar el deterioro de los recursos naturales porque están para proveer a las personas nada más. El ser humano no sería capaz…

     Ahora, en medio de este contexto político ya descrito, imaginemos a tres mujeres que sufren directamente las consecuencias de esta “Gran División” territorial.

     Una que fue víctima de secuestro y abuso por parte de un líder religioso que decidió que la vida entera y el cuerpo de esta chica pasarían a ser de su propiedad. Para cuando Valentina logra escapar de su captor, no sabe que ahora está en la “Nueva Jericó”, la tierra prometida, este paraíso donde ella encuentra policías y se siente inmediatamente segura, denuncia a su captor y como resultado obtiene años de cárcel, castigos y tortura por el delito de haber salido a la calle sin la compañía de un hombre y además, sufrió abortos provocados por su secuestrador.

     Otra mujer, Kalyna, una ucraniana que huyendo del caos político de su región fue víctima de trata de blancas y acabó en este país original, pero fue milagrosamente rescatada por nuestro candidato/pastor. Quien la convierte en su amante y se enamora perdidamente de ella, de su inteligencia, su seguridad, sensualidad y carisma. Le encanta su libertad de pensamiento, sus ideales y opiniones. Hasta que forma este nuevo estado y se la lleva a vivir en él con falsas promesas, sin avisarle que todas sus libertades serían nulas una vez que cruzara el muro. Así es como Kalyna de un día para otro, fue apresada por la Policía de la moral, que la conduce al Hospital de las mujeres, donde será adoctrinada para convertirse en la futura nueva esposa del ahora Pastor/presidente. En este contexto no debemos olvidar el calvario de la esposa del pastor/presidente, quien se ve obligada a aguantar el nuevo harem de su esposo, porque necesita decendencia y ella fue inútil para estos efectos, no fue capaz de darle hijos varones, solamente hijas, porque es su culpa claro está.

     Por otro lado, tenemos a María Paula, cuyo esposo, Carlos, se convirtió a la religión del candidato/pastor de una manera muy fervorosa, llegando a subir rápidamente dentro de esta organización. Así, un día Carlos decide llevarse a sus dos hijos a este nuevo país, lejos de su madre y sin su consentimiento. Por lo que María Paula emprende la difícil misión de adentrarse en este nuevo país para tratar de recuperar a sus hijos.

     Las vidas de estas tres mujeres se cruzan en su cautiverio y juntas tratan de escapar de ese infierno en la tierra en donde se vieron inesperadamente presas.

     Está de más decir que esto es un breve resumen del argumento de esta novela, que da muchísimo para reflexionar. El final es abierto, porque siendo realistas, si esto sucediera en una sociedad, no sería algo que se pueda arreglar de la noche a la mañana. Creer que los personajes fácilmente podrían tener un final feliz es imposible. Más bien el resultado de su lucha es incierto y las fuerzas militares del nuevo país amenazan con extenderse.

     A pesar de que las historias de estos personajes son amplias, la novela se narra de una manera elocuente, de corta extensión pero con la profundidad justa para entender y empatizar con ellas.

     Así pues, dejando de lado este mundo ficticio, esta novela nos hace reflexionar mucho sobre nuestra actual sociedad. ¿Realmente tenemos la equidad que buscamos? ¿Cuántas personas en el mundo viven todavía bajo un régimen extremista y con derechos coartados? ¿Cuántos países a nuestro alrededor han visto la proliferación de partidos políticos de base religiosa con ideales dudosos? ¿Recuerdan mis lectores los procesos electorales de Costa Rica en los últimos años? Hace un tiempo nadie hubiera imaginado que una historia como la que narra Adolfo Quesada Chanto en esta impresionante novela pudiese suceder. Ahora más bien, la leemos y no podemos evitar sentir ese miedo latente de pensar si podría algo de esto hacerse realidad. Pero claro, solamente es ficción, cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia. Aun así, con ciertas reservas marcamos el 15 de setiembre del 2035 esperando que sea una fecha normal y no profética.

     Sólo me queda decirles que si todavía no han leído esta fascinante historia, háganlo. De verdad que da muchísimo para analizar y reflexionar. Sobre todo hacer examen de conciencia y pensar qué está haciendo cada uno de nosotros por mejorar la sociedad en la que se encuentra y sobre todo, quienes tenemos la dicha de vivir en un país donde todavía tenemos derechos y libertades y podemos elegir a nuestros gobernantes (aunque a veces la oferta no sea muy grata), hagamos nuestra parte. No seamos parte del problema, seamos parte de la solución. Y cuando haya elecciones tomemos decisiones analizadas y no dirigidas por el fanatismo. Pensemos en buscar una mejor sociedad para todo el mundo, no una donde la discriminación sea la base de la vida.

     ¿Recomendada esta novela? Por supuesto que sí. Ofrece una profunda crítica política y social. Nos brinda una advertencia que involucra no repetir la historia, ni patrones de otras sociedades, nos describe un posible futuro que no quisiéramos alcanzar pero que no es del todo imposible, es una señal de alarma. Invita a pensar y nos hace sentir. Empatizamos con algunos personajes, a otros los odiamos. Definitivamente la capacidad del autor (orgullosamente costarricense, dicho sea de paso para quienes no lo conocen) para transmitirnos estas sensaciones a través de unas pocas páginas es de admirar. Y como siempre digo, un buen libro nos hace sentir intensamente, si no sentimos nada fue tiempo perdido, pero con este definitivamente el tiempo invertido vale totalmente la pena.

Nos leemos,

Litza.

 


              

lunes, 6 de noviembre de 2023

RESEÑA DE "EL PERGAMINO DE LA SEDUCCIÓN", DE GIOCONDA BELLI.

 


¿Qué es la locura? ¿Cuántas veces hemos calificado de loca a una persona sin saber realmente de qué se trata o los alcances de esta palabra? ¿Cuántas veces se ha tratado de definir la locura? ¿Por qué siempre se utiliza este término para denigrar a las personas si ni siquiera podemos definirlo bien?

 

Demasiadas preguntas que quizá no tengan una respuesta convincente, quizá nos plantean un reto filosófico difícil de descifrar y sin embargo, conforman una incógnita que muchas veces ha definido la vida de personas y hasta de naciones enteras.

 

¿Cuántos hemos escuchado hablar de “Juana la loca”? Probablemente, todos hemos escuchado aunque sea una mención alguna vez o inclusive, algo sabemos de la historia de Juana I de Castilla. Pero, ¿por qué nos parece tan normal que la llamen loca? ¿Alguna vez al escuchar o leer algo de su historia nos hemos cuestionado su locura o, simplemente la aceptamos como un hecho?

 

Sin duda este ha sido un tema que ha apasionado a muchos los interesados en la historia, sin duda muchos hemos sido alguna vez Manuel…

 

Manuel es un historiador que en el siglo XIX está obsesionado con la historia de Juana, pero su obsesión no es solamente académica, tiene un fuerte trasfondo familiar. Manuel forma parte de una familia noble de España, emparentados con Fernando de Aragón y que en el siglo XVI, fueron los responsables de custodiar durante muchos años a la reina Juana en Tordesillas. Manuel cree que sus antepasados fueron cómplices tanto de Fernando de Aragón como de Carlos I de España, manteniendo cautiva a Juana y causándole tortura psicológica, así como de negarle su derecho al trono.

 

Así pues, Gioconda Belli nos hace adentrarnos en la vida de Juana, en sus emociones, sus sentimientos, sus alegrías, tristezas y fracasos. Nos insta a entrar en su piel y descubrir si realmente estaba “loca” como siempre nos han dicho, o si solamente sentía.

 

El pergamino de la seducción es una fascinante novela histórica cargada de erotismo, con muchas aristas de psicología y moralidad que hacen que sus personajes sean complejos, nos generen empatía y nos lleven a cuestionarnos muchos supuestos.

 

Manuel explora la vida de la reina Juana de una manera muy particular, a través de los ojos y la mente de una adolescente, Lucía, quien tiene gran parecido físico e interés en Juana. Le cuenta la historia llevándola con cada relato a través de sus emociones como en un trance, con el cual logra que Lucía intente ponerse en los zapatos de Juana y averiguar si sus acciones correspondían a una persona loca, o si eran solamente una expresión de las emociones que tanto intentaban reprimirle. ¿Cómo se sentiría una mujer de los 1900’s si la trataran como a Juana en el siglo XVI? ¿Cómo se sentiría una persona del 2023 viviendo las situaciones que vivió Juana? Intriga, infidelidades, anulación por parte de su familia y pareja, separación de sus hijos, saber que su vida y sus sentimientos no importan, solamente importa la política, el poder y el supuesto bienestar de una nación. ¿Hasta qué nivel podría llegar la tristeza y la frustración de una persona al verse privada de todas sus libertades por sus seres más queridos?

 

La manera en la que Manuel narra la historia de Juana en esta novela hace que no solamente Lucía se cuestione la historia oficial, sino también nosotros como lectores. Resulta imposible no tener empatía con Juana, nos topamos de frente con el hecho de pensar: “¿Qué hubiese hecho yo?”. Y es que a lo mejor todos tendríamos reacciones similares a las suyas o peores. En pleno siglo XXI me atrevería a decir que si los hechos se dieron como los narra Manuel, Juana no estaba “loca”, seguro que hay muchos términos distintos para nombrar su situación muy lejos de ese estigma.

 

Pero en esta emocionante novela no solamente nos adentramos en los sentimientos de Juana, paralelamente conocemos la historia familiar de Lucía y Manuel. Como ya mencioné, Manuel busca reivindicar a Juana y por ende, manchar un poco la reputación de su noble familia, debido a su propio pasado, un pasado lleno de secretos familiares, rechazo y emociones mal gestionadas que lo llevan a olvidarse de realmente vivir. Manuel se obsesiona con Juana y con ello, descubre secretos de su familia que a la postre lo consumen.

 

Por otra parte Lucía, también tiene sus carencias emocionales debido a la falta de sus padres. Su deseo de pertenencia a una familia, su búsqueda de afecto y su corta edad, la hacen vulnerable y sucumbe a la romántica idea de explorar en la vida de una mujer que vivió siglos atrás. En el proceso reconoce sus propios sentimientos, explora su propia sexualidad, se descubre cuestionando las intensas pasiones de Juana y las suyas propias. Se cuestiona sus emociones en contraste con la moral que siempre le han inculcado, se descubre avergonzada y asustada por “sentir”. Sin embargo, esta exploración en gran medida la lleva a cabo de la mano de Manuel, quien es muchos años mayor que ella y al final, encontramos a un Manuel que se aventura a resolver un problema que podría dañar la reputación de Lucía, utilizando engaños y secretos, mismas acciones que han empleado sus antepasados y que tanto reprocha. Emociones sin sanar y patrones repetidos…    

 

Tres personajes muy complejos con una vasta historia en cuyo desarrollo vemos reflejada una sociedad que tal vez no ha cambiado mucho a lo largo de los siglos. Queremos creer que hemos avanzado mucho pero todavía seguimos reprimiendo sentimientos por vergüenza, seguimos cargando con muchos estigmas a causa de nuestras emociones y en el caso de las mujeres, también por vivir la sexualidad abiertamente. Y si queremos pensar que no es así, solamente tenemos que preguntarnos por ejemplo: “¿Cuántas veces hemos dicho o escuchado decir “no voy al psicólogo porque no estoy loco”?” Resulta que no hemos cambiado tanto, la salud emocional y mental sigue sin validarse como debería y se sigue de alguna manera denigrando a las personas por ello.

 

Este es solamente un enfoque, pero este libro realmente tiene muchas aristas que podríamos tratar, roles de género, patrones familiares, influencia religiosa y más. Lo más importante al final del día es que es una narrativa impresionante, que nos atrapa de principio a fin, nos hace sentir intensamente, pensar y cuestionarnos muchas cosas, Gioconda Belli es sin duda una escritora extraordinaria.

 

Si no han leído “El pergamino de la seducción” háganse un favor y léanlo, no se van a arrepentir, lean, déjense llevar por esta historia como lo hizo Lucía y sientan sin miedo, sin represiones, sin culpas, sin prejuicios, sólo sientan. Y cuando estén ahí respondan a la gran incógnita: “¿Estaba Juana realmente loca?”





domingo, 8 de octubre de 2023

RESEÑA DEL LIBRO "JOHNNY EMPUÑÓ SU FUSIL", DE DALTON TRUMBO

 

“Johnny empuñó su fusil” es una novela de trasfondo pacifista, escrita por el estadounidense Dalton Trumbo, en la que se plantea la problemática de las consecuencias con las que hay que lidiar luego de una guerra. Muestra una realidad muy cruda que busca disuadir al mundo de entrar en este tipo de conflictos.

 

Este libro narra la historia de Joe, un soldado estadounidense que se enlista en el ejército durante la Primera Guerra Mundial, para servir a su país y luchar por la libertad. Pero esta historia no tiene un buen desenlace para Joe, la misma es narrada en realidad desde un hospital en el cual despierta y poco a poco se da cuenta de que no puede ver, escuchar, hablar ni moverse. Perdió la capacidad de comunicarse, conforme pasa el tiempo se vuelve consciente de que no tiene extremidades, las cuatro le fueron amputadas, es básicamente un torso conectado a un respirador y con alimentación parenteral, porque también perdió casi toda su cara, lleva una máscara. Joe empieza a tratar de contar el tiempo y a buscar una manera de comunicarse, lo cual es sumamente difícil.

 

Mucho tiempo, años después inclusive, logra comunicarse por medio de código morse, pero durante todo ese tiempo atrapado en lo que queda de su cuerpo, aprovecha para recordar su pasado y en la narración, hace un exhaustivo recorrido por momentos importantes de su vida, así como de las razones por las cuales se enlistó en el ejército y es aquí, donde Trumbo nos plantea un interesante debate. Joe afirma haber entrado en el ejército gracias a la publicidad de ir a luchar por su país, por la libertad. ¿Pero qué es la libertad para alguien como él? Es un muerto en vida, después de haber tenido la ilusión de la promesa de una “libertad”, fue herido por una explosión de obús durante la batalla y quedó postrado en una cama, donde lo único que para su desgracia aun funciona, es su mente. Es totalmente consciente de que su cuerpo es su cárcel, no puede ni siquiera decidir acabar con su vida porque, es físicamente incapaz de hacerlo. Él dice que en realidad no existe ninguna buena razón para morir de la forma en que él lo hizo, porque sí, está muerto y tristemente, vivo a la vez.  

 

Cuando logra establecer comunicación, pide que lo saquen del hospital, desea salir y que la gente vea lo que puede suceder por ir a la guerra, quiere que estar aún “vivo” sirva de propósito para crear conciencia, sin embargo no consigue su objetivo. Es desgarradora la manera en la que el personaje narra su situación, recuerda la vida que tuvo antes de la guera, o la sueña. Nunca estamos seguros de si sus recuerdos son reales o idealizados por su mente encarcelada.

 

En la novela se plantea también un dilema religioso, Joe en su mente tiene “diálogos con Jesucristo”. ¿Cómo es posible que Dios permita a alguien permanecer así como él? ¿Debe resignarse a esa tortura hasta el final de sus días? ¿Por qué merecería un castigo semejante?

 

Esta novela fue publicada en setiembre de 1939, coincidiendo con el inicio de la Segunda Guerra Mundial, sin embargo, al volverse popular incluso entre los soldados, se prohibió su impresión y venta en 1941, dado que los muchachos perdían el interés por entrar al ejército luego de esta lectura.

 

Si hablamos del contexto histórico de la novela, está bastante acertado. Durante la Primera Guerra Mundial, los avances en medicina y cirugía reconstructiva eran muy pobres si no, inexistentes. Ante lesiones graves en extremidades era mejor amputar que tratar de salvar el miembro. Además, la terapia antimicrobiana todavía no estaba desarrollada (la penicilina fue descubierta hasta 1928), por lo que muchos soldados heridos morían a causa de infecciones. Muchos hombres quedaban mutilados y deformes. Dado que la cirugía reconstructiva no era una buena opción, quienes entraron en auge fueron los artistas que diseñaban máscaras, lo más realistas posibles, para cubrir las deformidades faciales que sufrían los soldados. Se dice además (aunque no hay pruebas oficiales), que soldados mutilados, en estado vegetativo se utilizaban para experimentos científicos, que es en última instancia la supuesta razón por la que se mantiene con vida artificial a Joe en esta novela.

 

Además de los daños físicos, es a partir de la Primera Guerra Mundial que empiezan a detectarse secuelas psicológicas en los soldados. Se empiezan a ver los síntomas del Trastorno de estrés postraumático como una enfermedad (varios años antes se había comenzado a estudiar pero sus síntomas eran atribuidos a la cobardía), aunque este término se acuñó hasta 1980. En 1915 se le dio el nombre de “Shell Shock” y se describía como un padecimiento nervioso originado por la constante exposición a los bombardeos y explosiones de artillería.     

 

Aunque el carácter pacifista que Dalton Trumbo quiso darle a su obra es claro, no fue suficiente para impedir posteriores encuentros bélicos. Lo que es una realidad es el debate filosófico que nos plantea y que sigue vigente aún en nuestros días. ¿Vale la pena luchar por una libertad y una vida que en realidad vamos a perder? ¿Por la vida de quién lucha un soldado? Porque quienes los envían a la guerra a morir o peor, usualmente están resguardados esperando un desenlace. ¿Realmente existe una razón que justifique llegar a estas consecuencias? ¿O ese honor del que se habla por “servir a la patria” es una cortina de humo? ¿Y qué pasa con los daños colaterales, con tantas personas inocentes afectadas en medio de estos conflictos?

 

Son preguntas que quizá tengan muchas o ninguna respuesta convincente, lo que sí es una realidad es que tanto en esos tiempos como en la actualidad, en una guerra no hay ganadores, simplemente todos perdemos.


Nos leemos,

Litza.




domingo, 7 de mayo de 2023

¿QUIÉN ES ANACRISTINA ROSSI?

 

Para quienes no la conocen, les comparto la breve reseña que se adjunta en la solapa de su novela “Tocar a Diana”:

 

Anacristina Rossi nació en Costa Rica (1952) y vivió largo tiempo en el extranjero. Entre sus novelas destacan María la noche (1985), Premio Nacional de Novela de Costa Rica, traducida al francés por Actes Sud en 1997; La Loca de Gandoca (1992) con casi un millón de ejemplares vendidos, considerada la primera novela ecofeminista de Costa Rica y probablemente de Centroamérica; Limón Blues (Alfaguara, 2002), Premio Latinoamericano de Narrativa José María Arguedas en Cuba en 2004; Limón Reggae (2007), traducida al italiano por Aracne en 2010, y La romana indómita (2016). Sus cuentos han sido traducidos y publicados en antologías tan diversas como Novel of the World (Fondazione Mondadori, Milán 2015), 13 Ficciones del país sin soldados (UNAM, México, 2015) y Los cuentos que Pessoa no escribió (Madrid, 2018). Es autora de un cuento para niños sobre el cambio climático: Ana Rana tiene sed (2015).

 

Sus ensayos, publicados en libros y revistas, giran esencialmente alrededor de tres temas: la primera literatura escrita afrocostarricense, el cambio climático y la sexualidad. En 2004 el gobierno de Chile le otorgó la Medalla del Nacimiento de Pablo Neruda, por el conjunto de su obra. Tiene una maestría en Mujer y Desarrollo por el Instituto de Estudios Sociales de La Haya, Holanda, y un Diploma de Estado en traducción de la Escuela Superior de Intérpretes y Traductores de París.

 

Tocar a Diana (2019) es su sexta novela.

 

 *Imagen tomada de internet.



RESEÑA "TOCAR A DIANA", DE ANACRISTINA ROSSI.

 

RESEÑA DEL LIBRO “TOCAR A DIANA”, DE ANACRISTINA ROSSI

 

    Como era de suponer, la primera reseña es la del libro cuya presentación y lectura me inspiró a escribir.

     Tocar a Diana” es una novela publicada en el 2019 clasificada como novela erótica, sin embargo yo diría que es algo realista. Podría decirse que es una novela corta, pero sus 207 páginas de extensión logran mover todas las emociones que la autora quiso evocar y tantas como el lector lo permita.

     No se anda con rodeos, desde el primer momento en que Diana está en sesión con su psicoanalista, comenzamos a notar el rumbo de esta historia, la cual es narrada de manera directa, cruda y explícita. Ella asiste a terapia porque cree tener una obsesión con el sexo que inclusive, ha estado a punto de interferir con su vida laboral y ese fue el punto de inflexión, no quería poner en riesgo el trabajo que tanto amaba. Comienza a contarle su historia a este terapeuta, quien intenta averiguar el origen de su obsesión.

     Así, Diana hace un recorrido por su vida, desde su niñez vivida en Costa Rica, entre San José y las fincas familiares en Guanacaste y en el Caribe Sur. Hija de una familia conservadora y de buena posición económica, que seguía las buenas costumbres de su época, o al menos esa era la imagen que querían dar. Sin embargo, Diana no se sentía a gusto en ese estilo de vida. Su alma libre y su gusto por la naturaleza la llevaron a expresar una rebeldía que a su familia no le agradaba. Presa de las relaciones familiares disfuncionales, con un padre autoritario y una madre incapaz de demostrarle amor y ternura, la protagonista crece y hace lo mejor que puede con esos patrones aprendidos.

     En medio de esta exploración, Diana cuenta cómo cuando crece y empieza a descubrir su sexualidad y el placer que su cuerpo es capaz de sentir, comienza a obsesionarse con esas sensaciones. Además, descubre que tiene impulsos quizá poco convencionales para lo que es socialmente aceptado. Aunque ella no creía que estuviera mal vivir su placer de esa manera, de algún modo sentía que no era del todo suyo. Sentía impulsos muy fuertes pero no era capaz de discernir de dónde venían ni de controlarlos y era esa incertidumbre la que la incomodaba, empezaba a sentirse algo culpable por ser así, “se le metía el diablo” decía ella cuando de nuevo tenía deseos. Pero eso lo pensaba porque creía que los demás no eran capaces de entenderlo, cuestionarían su reputación, aunque ella quería creer que lo que hacía era buscando amor.   

     Sin embargo su terapeuta, conforme analizaba sus sesiones se dio cuenta de que en realidad, ese era un patrón aprendido; de alguien aprendió que esa conducta debía ser así y su subconsciente lo procesó creyendo que su única forma de disfrutar sería exhibiéndose a varias personas, participaran o no. Encontró también escenas de su pasado que involucraban a sus hermanos y a un familiar, cuya figura resultaba simbólicamente muy importante dentro de sus fantasías y miedos.

     Así fue como Diana siguió explorando en sus recuerdos hasta encontrar el origen de su conducta y se dio cuenta, de que en realidad no había comenzado con ella. Era una cadena de secretos familiares turbios, de sufrimiento, abuso y encubrimiento del que muchos habían sido víctimas, pero nadie nunca había tenido el valor o las posibilidades de admitirlo ni de frenarlo. Porque para frenar lo que sucedía había que poder recordarlo y expresarlo. Y si ambas cosas estaban dentro de las posibilidades de alguna víctima y lo hacía, significaría manchar el buen nombre de una familia respetable. ¿Y quién querría algo así? Era mejor dejarlo pasar, suponer que fue un caso aislado y no sucedería de nuevo, “hacerse de la vista gorda”, aun cuando eso significara poner en peligro a sus propios hijos.

     Diana era ese eslabón que venía decidido a romper una larga cadena de prejuicios e injusticias. ¿Cuánto habrá sufrido ella también hasta llegar a descubrir su historia familiar? Era la llamada “oveja negra”, pero sería la única que gracias a su carácter y rebeldía, tendría el coraje de venir a romper patrones, a alzar a voz, a sacar a la luz una dolorosa historia que debía ser contada para empezar a sanar a muchas personas que habían sufrido y de paso, salvar a los más pequeños de sufrir el mismo calvario.

     Tocar a Diana” es una novela que nos confronta, que pone en la mesa de discusión temas muy importantes de los que se debe pero por lo general no se quiere hablar. Ha sido utilizada inclusive en círculos de terapia de mujeres fuera de Costa Rica, como apoyo en el tratamiento psicológico de mujeres abusadas. Es una historia cruda como ya mencioné, pero que nos enseña la importancia de dejar los prejuicios atrás, el miedo al “¿qué dirán?” y luchar por detener crímenes que hacen tanto daño y que, muchas veces comienzan a suceder a víctimas de muy corta edad y por familiares que deberían protegerlos en vez de violentarlos. Es doloroso contar historias como esta, sí. Porque sanar duele, encontrar el valor para hablar y remover todos esos sentimientos que han sido sepultados para no sufrir, es sumamente doloroso y difícil.

    Son esas llamadas “ovejas negras” las que vienen a romper estos patrones familiares que llevan generaciones afectando un linaje, sólo ellas son capaces de venir a cambiar el rumbo de tantas vidas…

     Si no conocen este libro, permítanse leerlo, vale todo el tiempo invertido. Luego me cuentan qué les pareció.

     Nos leemos.

     Litza.




viernes, 21 de abril de 2023

¿Qué es "Mi cofre de historias"?

 

“Mi cofre de historias” es una idea que nace por dos razones: la necesidad de compartir mis lecturas y dar a conocer libros y autores de los que no se habla tanto. ¿No les pasa que terminan un libro y quisieran comentarlo con alguien pero, no tienen con quién hacerlo? Pues a mí sí, si son lectores me comprenderán. O a veces sí hay con quién compartirlo, pero de alguna manera uno quiere algo más. 

Y ese “algo más” llegó a mí en setiembre pasado, durante la Feria Internacional del Libro Costa Rica 2022. Después de pasar dos años sin una feria del libro fue refrescante volver, recorrer los pasillos y estantes y, dejarse sorprender por las cosas nuevas que se pueden encontrar ahí reunidas, que normalmente no vemos. Porque lo usual es ir a las grandes librerías, pero en ellas abunda la literatura que viene de “afuera”. Seamos honestos, muchos no conoceríamos a los autores nacionales de no ser por este tipo de actividades. A algunos los conocemos porque fueron nuestros profesores, son amigos de la familia, los vimos anunciados en alguna página de editorial, pero muchos otros pasan desapercibidos. Y entonces uno se pregunta: ¿Por qué en Costa Rica hay tan poco apoyo al talento nacional? ¿Por qué no se habla más al respecto? Y descubrí que no es una inquietud que solamente yo tuviera. 

Asistí a la presentación del libro “Tocar a Diana”, de Anacristina Rossi, publicado en el 2019. Luego de esa presentación espectacular, que debo reconocer que me erizó la piel, tocamos ese tema del apoyo al escritor nacional. Tanto ella como nosotros, su público, teníamos la misma percepción. Ahí recordé que hacía tiempo tenía esta idea rondando en mi dispersa cabeza, de hacer reseñas de lo que voy leyendo y no lo había hecho. Se me ocurrió además, que sería una bonita oportunidad para incluir los autores nacionales que he leído y sigo descubriendo. Así, como podrán comprobar, seguí pensándolo varios meses, hasta que me animé, justamente en vísperas del día del libro, seguro que la celebración me inspiró. 

Quizá no tenga tantas reseñas listas como libros leídos, pero poco a poco las iré escribiendo. Deben saber que desde que aprendí a leer, prácticamente por mi propia cuenta, fue un gusto que ya nunca perdí. Así que son muchos los libros leídos y más aún, los que me faltan por leer, es una lista infinita, pero me prometo a mí misma compartirles todo lo que pueda. 

Espero les guste y les sirva de inspiración también, no sólo para leer sino para animarse a iniciar esos proyectos que siempre han querido realizar pero siguen posponiendo sin una buena razón. Así que, los espero en este pequeño rincón donde las historias van a empezar a asomarse y una vez leídas, serán guardadas en este cofre mágico, como el tesoro que son para cada lector. Y recuerden siempre que la felicidad es un camino que se recorre leyendo…

Litza.



RESEÑA DEL LIBRO "LA MURALLA DE DIOS"

  “LA MURALLA DE DIOS”        En la contraportada de este libro se lee lo siguiente:   “ La muralla de Dios demuestra un profundo enten...